Agradecemos a Amelio Rodriguez por compartir tan bonita poesía dedicada a nuestro hermoso estado.
CHIAPAS EN LA LEJANÍA.
A veces quisiera volar a la lejanía,
volver otra vez a mi lindo Chiapas,
ahora sé porque reclama la tierra,
es la voz en lo profundo del alma,
que me hace evocar la tierra mía,
donde quisiera descansar en paz,
porque morir en la lejanía aterra,
es volver a recobrar ansiada calma.
Añoro la región zoque de Ixhuatán,
añoro bañarme en su refrescante río,
que de la montaña baja muy despacio,
incrementando su paisaje exuberante,
donde las horas hermosas vienen y van,
lugar donde sí de la gene yo así me fío,
porque es donde disfruto de todo espacio,
que hasta el recuerdo me resulta delirante.
Deseo disfrutar de la brisa mañanera,
al caminar por exuberantes cafetales,
cortar los racimos del guineo ruatán,
cortar naranjas para llenar el morral,
esto es desear ser feliz a mi manera,
al disfrutar de sus deliciosos frutales,
es maravilloso vivir así en Ixhuatán,
donde los días benditos vienen y van.
Disfruto el cacaté que tanto me gusta,
admirar pasar a sus sencillas mujeres,
o al campesino cuando así nos saluda,
viviendo en el barrio, preciada Libertad,
¿A quién vivir así la paz le disgusta?,
como en el pasado felices son los seres,
que hasta el mismo Pablo sin ser Neruda,
le cantaría si hubiera vivido ahí su pubertad.
Quién no recuerda a la joya deTapachula
hermosa y contradictoria ciudad fronteriza,
de nuestra sufrida hermana Centroamérica,
al ser compañera de nuestro mismo dolor,
lugar donde abundan las hembras chulas,
que pasean al compás de cadenciosa brisa,
soñando en la hermandad de la quimera,
de que el Soconusco es con todo, puro amor.
La Sierra Madre con sus exóticos encantos,
encanto que en demasía cautiva al alma,
al aspirar el perfume de sus arboledas,
y el candor de sus legendarios habitantes.
Por eso le brindo en poesía mis cantos,
para recobrar tan siquiera así la calma,
para algún día al caminar por sus veredas,
por eso lo recuerdo aunque esté distante.
Después paso a los Altos de Chiapas,
San Cristóbal la regia de los coletos,
al caminar por sus estrechas calles,
recorriendo sus cultas y ricas librerías,
buscando en la lectura la anhelada paz,
de Santo Domingo aspirar el pinabeto,
disfrutando de sus múltiples detalles,
confundido entre la múltiple gritería.
Mi lindo Chiapas, lugar de contradicción,
por la distribución de sus desigual riqueza,
donde la herencia española aún se siente,
en todos los rincones aún tanto se respira,
lo mismo expresa la colonial construcción,
como la creencia que domina las cabezas,
es lo hace que la desigualdad se acreciente,
pero aún así mi corazón por ti tanto suspira.
Chiapas la tierra de la maravillosa chía,
donde está ausente aún la anhelada paz,
Chiapas, eres cual México en miniatura,
por contar con la variedad de sus climas,
por lo mismo yo muero por ti en la lejanía,
paradójico, la paz solo en tu himno lo das,
y resulta en la más elemental lógica, locura,
en tanto en la práctica a tu gente lastimas.
De mi bella tierra solo me falta conocer,
de Tecpatán su ya legendaria cultura,
cultura zoque de donde yo desciendo,
pero confío que algún día lo conoceré,
recorrerlo antes que pueda yo fenecer,
mucho antes de descender la sepultura,
por esto en la lejanía estaré bendiciendo,
esa tierra que por siempre tanto amaré.
Amo la contradictoria región petrolera,
límite fronterizo con el estado de Tabasco,
región inmisericordemente tan explotada,
agudizando los problemas de explotación,
amo también Pichucalco región platanera,
donde abunda tanto la planta del barbasco,
por tantas cosas te recuerdo región amada,
te recuerdo en mi nostalgia con el corazón.
La región Selva también la tengo presente,
donde el nativo ya ha levantado la voz,
teniendo que hacerlo a través de las armas,
para ser tomado en cuenta por su nación,
aunque esto pueda parecer tan demente,
ha tenido que tomar como arma la hoz,
y aunque muchos esta actitud alarma,
se necesita para ello una gran pasión.
Palenque, corazón de la altiva montaña,
donde Pakal enigmático aún descansa,
concreción de la tierra y el firmamento,
que ve resurgir su reinado legendario.
Pakal Ná se puso el pasamontañas,
porque al ver que su raza ya no avanza,
así que no soportó mas lastimero lamento,
por eso decidió acabar con civilizado calvario.
Después del movimiento zapatista,
ya nada será igual para Chiapas,
porque si ahora existe violencia,
es la lógica salida a la explotación,
sin importar el calificativo de alarmista,
es el único camino para la verdadera paz,
solo las armas borraran las reminiscencias,
es el reto levantar una mas justa nación.
Y así llegamos a la región maicera,
que de Chiapas es el mejor granero,
empezando con hidalga Villa Flores,
tierras de temporal, también de riego,
donde produce productos de primera,
porque a eso se dedican los granjeros,
y agrónomos aplican a la tierra saberes,
encontrando solo así todos el sosiego.
J7.10.99.9.07.