Fotografías: Julio César Cruz Álvarez
Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- El chiflido de las personas que desesperadamente pedían el comienzo de la lucha libre se mezclaba con el grito de los vendedores de chicharrines, cacahuates, aguas, bolis y refrescos. Era el penúltimo día de feria en el Barrio “bravo” de San Roque.
Para las seis de la tarde en las gradas alrededor del cuadrilatero ya no habia ningun espacio disponible para sentarse, la gente tenía que buscar otros lugares para poder apreciar las peleas que se han vuelto toda una tradición en este lugar.
Niños con máscaras de sus luchadores favoritos, jóvenes que portaban playeras con retratos de gladiadores del pancracio, parejas de novios y familias completas, todos esperaban la magna función con las estrellas de la Triple A: el Dr. Wagner contra Silver King.
Con la parroquia de San Roque y San Bartolomé de fondo, dió inicio el primer combate entre Brillantina, Éxodo y Black Smog, por parte de los técnicos, contra el bando de los rudos conformado por Venganza, Draken y Venganza, mejor conocidos como Los Sicarios del Ring. Con toda la maldad que los caracteriza los Sicarios le sacaron lumbre al cuadrilatero y ganaron la pelea pactada a una caída.
El sonido de las campanas de la iglesia anunciaban la entrada de flores y la celebración de la misa en honor a los santo patrón del barrio, mientras tanto se daba paso al segundo enfrentamiento de la tarde-noche, tocó el turno del equipo de los cientificos conformado por Mister Calaca, Gacela y Boltrom, quienes dejaron el alma en el ring para vencer a la tercia ruda integrada por Samuray, Sangre de Águila y Guardián del Infierno.
Continuaron las peleas y la gente se emociobana cada vez más, abundaban las carcajadas ante las ocurrencias de los luchadores, y aunque las palabras altisonantes se escuchaban por todos lados, sin duda fue un día que todos los presentes disfrutaron en esta feria popular, que tiene como reglamento no vender bebidas alcoholicas por respeto a las familias.
Tambien subieron al cuadrilatero luchadores como Charly Galán, Mister Master, New Fire Jr., y Granda Man, quienes se han convertido en unos verdaderos ídolos de la lucha libre en Chiapas. De igual manera dieron un gran espectáculo el Dr. Electro, Monte Cristo, El Verdugo, Murci Jr., Argel y Lluvia de Estrellas.
Cayó la noche, se encendieron las luces y con la música a todo volumen por ratos uno se imaginaba en las grandes arenas de la lucha libre, pero estabamos en el histórico barrio de San Roque disfrutando enfrentamientos de calidad mientras llegaba la ansiada peleas estelar.
No podia faltar los clasicos luchadores «minis» que son deportistas de baja estatura, en esta ocasión Brazito de Oro y la Parquita hicieron equipo para enfrentarse a Sepectrito y Ultraman, fue una pelea que emocionó mucho a los níños quienes aprovechaon la ocasión para tomarse una foto.
Tocó el turno de la presentación de Huracán Ramírez Jr. liderando al equipo de los técnicos contra Spektro al mando de los rudos. En una lucha a dos de tres caídas sin límite de tiempo y con la esperada narración del doctor Alfonso Morales, el bando técnico complementado por Kensuki y Super Hechos vencieron a Spektro, Alacrán de Durango y Terrorista. Había sido la mejor pelea de la noche hasta el momento.
El comentarista de Televisa Deportes anunció la pelea super estelar, el publico gritaba con fervor, se oian las cornetas y el ruido de las matracas; y salió Gringo Loco, luchador chiapaneco que hizo pareja con Silver King, quien al aparecer recibió pocos aplausos pero sí muchos abucheos.
Faltaban los técnicos, el representante de Chiapas para esta pelea fue el legendario Guerrero Zulú; pero todos esperaban la aparición de uno de los mejores luchadores del mundo, “la máxima figura de la lucha libre mexicana” según Alfonso Morales, el Dr. Wagner, a quien el público le dió la bienvenida con una lluvia de aplausos.
Al principio cada gladiador chiapaneco enfrentó a su rival de la Triple A, de esta manera el Guerrero Zulú fue uno de los más lastimados ya que Silver King demostró una gran técnica dentro del cuadrilatero al ejecutarle varios tipos de llaves.
Mientras tanto y para sorpresa de muchos, el Dr. Wagner recibia una paliza por parte del Gringo Loco. Este último parafraseo una frase de Wagner y dijo “En mi pueblo y con mis chamulas se me respeta”, y aunque este término no debe ser despectivo, provocó la rabia de los presentes quienes pedían al campeón latinoamericano darle su merecido al tambien conocido como Capitán Furia.
Dr. Wagner y Guerrero Zulú seguian siendo dominados por los rudos, los luchadores no respetaron el cuadrilatero y se fueron hasta las gradas, las sillas volaban por todos lados y varias fueron quebradas en la espalda de cada uno de los técnicos; incluso se subieron al escenario donde se presentan los grupos musicales y la mesa ocupada por el Doctor Alfonso Morales sivió de “colchón” para las caídas ejecutadas.
Despues de este preambulo, la pelea se puso más pareja al enfrentarse el Guerrero Zulú contra Gringo Loco y el Dr. Wagner contra Silver King, hermanos en la vida real. Se invirtieron los papeles y los rudos fueron duramente castigados, pero tenian la ventaja de contar con el referi a su favor.
En una clara pelea con muchas artimañanas no penalizadas por el referi “El Suavecito”, Silver King y Gringo Loco obtuvieron el triunfo, esto por supuesto no fue del agrado del público quienes abuchearon a los triufadores y gritaban al unísono el nombre del Dr. Wagner.
Al final, los perdedores pidieron la revancha pero esta no fue aceptada en su totalidad, solamente el Gringo Loco se animó a disputar una lucha de cabellera contra cabellera contra Guerrero Zulú. Parecía que el ensangrentado Zulú perdería por segunda ocasión pero despues de un lanzamiento desde la tercera cuerda consiguió debilitar a su contricante a quien posteriormente logró vencer.