
Bartolomé de las Casas nació en Sevilla en 1484, aunque los historiadores no se ponen de acuerdo sobre la fecha y el lugar. Algunos dicen que fue diez años antes, otros dicen que no fue en Sevilla sino en Triana. Cuentan que cuando Bartolomé era niño vivió una experiencia que marcó su vida, era la Semana Santa de 1493 y su padre lo había llevado a ver las procesiones en las calles de Sevilla.
En un sitio llamado el Arco de San Nicolás estaba ocurriendo algo nunca visto: un navegante famoso volvía de un largo viaje de tierras ubicadas del otro lado del mar. Yo los vi, escribió muchos años después fray Bartolomé. ¿A quiénes vio el niño Bartolomé? De pie, detrás de Cristóbal Colón, se hallaban unos hombres de aspecto impresionante, de piel del color de la tierra, que portaban magníficos objetos, jamás vistos en España. La primera vez que fray Bartolomé de las Casas vio a esas personas, que Colón llamaba indios, lo hizo con ojos de niño.
¿Quién fue Bartolomé de las Casas y que hizo?
Bartolomé se formó como abogado y llegó a América con su padre en 1502, como la mayoría de los españoles buscaban riquezas en el Nuevo Mundo. Durante algún tiempo fue parte de esa dura lucha de exterminio contra los indígenas porque fue encomendero y tuvo esclavos. Sintió el llamado del sacerdocio, fue el primero en ser ordenado en el llamado Nuevo Mundo. En 1510 llegaron los dominicos y fray Bartolomé se desempeñó un tiempo como intérprete durante las predicaciones, pero su convivencia cotidiana con la realidad de estas tierras hizo que cambiara poco a poco su visión sobre la presencia española en el nuevo continente.
Fue enviado a Cuba como capellán del ejército y recibió esclavos indios y tierras. Aunque su trato hacia ellos fue siempre benevolente, no podía cerrar los ojos ante la brutal explotación de la que eran objeto. En 1514 renunció públicamente a sus encomiendas e inició su predicación contra el sistema. Viajó a Sevilla en 1516 para denunciar el exterminio de la conquista y solicitó cambios, no muy revolucionarios ni radicales, que le merecieron ser nombrado Protector de los Indios.
Diseño algunos planes de colonización pacífica poco exitosos; con un proyecto de comunidades, de alguna forma pudo lograr cambios al promulgarse nuevas leyes sobre el trato de los indígenas. Bartolomé de las Casas fue un redactor sublime, abogado por oficio, abanderado de la igualdad, procurador y protector universal de los indios. Precursor de los derechos humanos, libertador de los indígenas y Obispo de Chiapas, todo esto hizo durante su vida, tuvo diversos cargos entre los más notables y recordados por ser el primer Obispo de Chiapas, es indudable que Fray Bartolomé de las Casas es para Chiapas el más firme defensor de la libertad para los indígenas.
Primer Obispo de Chiapas, Fray Bartolomé de las Casas
En 1552 ingresó a la orden dominica y se dedicó al estudio de la teología. Desde Santo Domingo escribió la mayoría de su obra de denuncia a la injusticia contra los naturales de las tierras del Nuevo Mundo. En 1543 lo nombraron obispo de Chiapas, aunque sólo duró cuatro años en ese cargo su huella es perdurable. La ciudad que lleva su nombre nos lo evoca cada día: San Cristóbal de Las Casas.